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A principios de 2022 el Cabildo de Tenerife aprobó el libre acceso de los animales de compañía al transporte público de Tenerife, para lo que quedó pendiente el desarrollo del reglamento con las normas a cumplir. Después de esperar más de un año, desde el 1 de junio de 2023, ya es posible viajar en TITSA o Tranvía con tu perro… Pero, si bien es cierto que todos los perros pueden acceder al transporte público de Tenerife. Al leer la normativa vemos que la letra pequeña importa, y mucho.

En el momento de aprobar el libre acceso de perros al transporte público, el concejero deCC-PNC declaró que «Tenerife tiene que posicionarse como una isla amiga de los animales en consonancia con Europa y que sea un atractivo más para los turistas que nos visitan. Tanto los residentes como los visitantes deben tener facilidades para trasladar sus mascotas en el transporte público»  y que «hay que adecuar y actualizar las normas que regulen el acceso de los animales a los medios de transporte público de Tenerife y que esto sirva para incentivar el uso por parte de la ciudadanía del mismo frente al transporte privado«. Es decir, los objetivos a conseguir al aprobar el acceso de animales de compañía al transporte público de Tenerife se podrían resumir en 1) «ser pet-friendly» y 2) «ser sostenible» al facilitar su uso frente al transporte privado.

Pueden acceder a las normas específicas en los siguientes enlaces: Reglamento del Viajero de TitsaCondiciones para viajar con perro en Tranvía de Tenerife

Vamos a analizar las normas y si realmente van a ayudar a conseguir los objetivos de «Tenerife – isla amiga de los animales» y sostenibilidad:

1. Sólo se permite 1 perro por vehículo

Entiendo que hay que poner un límite de capacidad, al igual que con las personas. Pero, ¿sólo 1? ¿Ni siquiera 2?

Actualmente es más habitual que las familias tengan más de 1 perro (de hecho, el número medio de perros por hogar en 2021 fue de 1.5). Así que con esta medida, la mayoría de familias tendrán que viajar separados, o seguir haciendo uso del coche (los que tengan), por tanto a parte de ser una norma muy poco petfriendly, tampoco es muy sostenible…

2. El perro deberá hacer siempre uso del bozal

Esta norma era totalmente previsible, ya que es la mejor herramienta de seguridad que se puede utilizar.

Sin embargo, estaría bien haber especificado que fueran bozales de cesta. Recordamos que los bozales de tela que no permiten abrir la boca están prohibidos por normativa en el municipio de Santa Cruz de Tenerife (Artículo 12.6. de la Ordenanza municipal reguladora de la protección y tenencia de animales de Santa Cruz de Tenerife), además son más incómodos para los perros y peligroso en días de calor.

Sin duda, aquí será importante buscar un bozal cómodo para nuestro perro, así como trabajar bien su habituación, para que tolere llevarlo puesto. En este sentido, desde nuestro centro recomendamos el Bozal Baskerville Ultra.

3. Deberá ir sujeto con correa corta

Aunque en la normativa del Tranvía no especifica longitud, en Titsa la limitan a 50 cm. Y ésta es, sin duda, la norma que más me choca. Ya es obligatorio por las leyes de tenencia de animales que los perros vayan atados en zonas públicas, además puede pedirse que el responsable del animal lo controle e impida que se acerque a otros viajeros, e incluso prohibir el uso de correas extensibles, pero las correas extremadamente cortas son mucho más peligrosas que las de tamaño estándar de 1 metro.

Al limitar el movimiento del animal, éste estará mucho más tenso, por lo que será mucho más fácil que responda de forma inadecuada en una situación de tensión. Además, si el perro es de tamaño mediano, y el dueño es alto, ya me dirán cómo consigue mantener sujeta la correa, sin soltar los soportes de sujeción para no caerse y sin dejarse la espalda en el intento… Ya que para estar en la zona habilitada para los perros, el responsable del animal tendrá que viajar de pie. Como encima el perro vaya con collar, ya me veo las lesiones de cuello por los tirones de correa cuando la guagua coja una curva, un bache o incluso con las frenadas…

4. El perro no podrá ocupar asiento y el responsable deberá mantenerse a su lado

Que no puedan ocupar asiento es totalmente entendible, ya que estamos hablando de perros medianos/grandes. Los perros pequeños (de menos de 10kg) podrán ir en la zona de asientos, haciendo uso del transportín (de 60x35x35 cm).

En el caso del Tranvía, el perro debe viajar en el último vagón, en la zona que se ha habilitado para ellos. Sin embargo, al ver las fotos, descubrimos que dicha zona no llega ni a un metro cuadrado, y está justo al lado de las puertas. Por tanto, en cada parada, cuando se cierren las puertas, habrá que vigilar que la cola de nuestro perro no se quede atrapada con la puerta.

En el caso de las guaguas de Titsa, el perro debe viajar en la zona habilitada para sillas de ruedas, por tanto sólo podrá viajar en guaguas accesibles.

Ahora me planteo una posible situación… imaginémonos una persona mayor, que tiene un perro no demasiado grande, de unos 12-15kg, y también mayor, ambos con artrosis y algo de problemas de movilidad. Para cumplir las normas, la persona mayor no podrá sentarse durante todo el trayecto, corriendo incluso el riesgo de una caída.

5. Se establece limitación horaria: de lunes a viernes, de 7:00 a 9:00 y de 13:00 a 15:00h., los perros sin transportín no podrán hacer uso del transporte público

Esta norma se entiende dada la gran afluencia de personas en esas horas. Además, los perros también agradecerán que no los metamos en un espacio tan reducido con tanta gente, y sin apenas espacio. De hecho, yo sería la primera que evitaría meterme con mi perro si el tranvía o la guagua está hasta arriba…

Resumiendo…

Tras leer y analizar las condiciones para acceder con perros de más de 10kg al transporte público de Tenerife no puedo evitar sentir una total decepción. No creo que ninguno de esos objetivos que esta medida debía cumplir (ser pet-friendy y sostenible) se vaya a cumplir.

Sin embargo, no podemos decir que sea una mala noticia.  Seguro que más de un perro y su familia se van a beneficiar de este cambio, pero ni de lejos es la noticia que muchos estábamos esperando desde el año pasado. De todos modos, esperemos que esta nueva etapa funcione lo mejor posible, para que poco a poco, estas normas se vayan ajustando y mejorando.